El miércoles 22 de abril, el periodista Alfonso Baella reunió a los abogados César Nakazaki y Gonzalo del Río para hablar sobre el impacto de la pandemia en los establecimientos penitenciarios.
Al final de la entrevista, a propósito de la pregunta de un participante, el doctor Gonzalo del Río se ocupó de la investigación preparatoria. Así, dijo que el problema de la prisión preventiva es una máscara que esconde el verdadero problema que es la excesiva duración de las investigaciones preparatorias. No existiría prisiones preventivas si las investigaciones preparatorias no duraran mucho, sostuvo el letrado. Les dejamos su intervención.
El problema de la prisión preventiva es solo la cara o la máscara de un problema más grave, que es que las investigaciones preparatorias están durando muchísimo […]. No nos preocupamos de que la investigación preparatoria es exactamente igual que hace 30 años. La investigación preparatoria se sigue iniciando con un policía o un fiscal que llama a una persona y le dice «usted conoce a…» y cita un glosario de nombres y toma dos, cuatro, tres horas contestar si conoce a Juan y de dónde lo conoce.
Con todo respeto, así no se investiga en ninguna parte del mundo. Las técnicas de interrogatorio en sede fiscal o policial que utilizamos acá son del siglo antepasado. […] Estamos bien en juicio oral, eso está bonito, lo hemos dejado bonito. Ahora vayamos al otro problema, al que siempre fue el problema: la investigación preparatoria.
Ustedes recuerdan que en los finales de los años 80 y los inicios de los 90, hubo una modificatoria procesal que consideró que sacar el juicio oral hacía el proceso más rápido. ¿No es cierto? Y 20 años después nos dimos cuenta de que no servía para nada, que el juicio oral tenía que volver, y que la gran demora era aquello que llamamos instrucción judicial. Lo cambiamos por investigación preparatoria. La pregunta que nos tenemos que hacer es… ¿estamos yendo más rápido? No […].
El problema no es del Código, no es del Ministerio de Justicia, ni del presidente de la República. El problema es que estamos actuando mal dentro de la investigación. Y eso es fundamental.