Con esta decisión Alemania se convierte en la nación pionera en el mundo en reconocer la intersexualidad. Así, el Tribunal Constitucional alemán da un paso audaz, con pocos precedentes, al abrir el camino legal para inscribir en el registro civil a personas con un sexo distinto a los tradicionales hombre y mujer.
Con arreglo a esta decisión de la Corte de Karlsruhe, los alemanes podrán inscribirse, como «inter», «diverso» u otra categoría que los identifique de manera positiva. Con ese objeto, el Tribunal ha establecido un plazo que vence a fines del próximo año, 2018, para que mediante ley se aprueben todas las reformas necesarias destinadas a permitir este tipo de inscripción en el registro civil.
Como se sabe, ya hacia el año 2013, Alemania dio los primeros pasos permitiendo a sus ciudadanos dejar en blanco (omisión) la casilla binaria del registro. Ahora, a esa libertad se añade este paso consistente en poder registrar la tercera opción, toda vez que la Corte consideró un acto de discriminación no hacerlo.
«Antes, a las personas que no encajaban en la definición binaria, se les asignaba la categoría de los que no tienen sexo. Ahora son personas con un género definido y por lo tanto con derechos. Esta es una decisión muy importante», dice Mortiz Schmitz en declaraciones que recoge El País. Como se sabe Schmitz es portavoz de Dritte Option, institución que en 2014 judicializó el caso que ahora termina en esta decisión.
En un tramo de su argumentación, el Tribunal dijo que la Constitución protege también la «identidad de género» de las personas que no puedan ser clasificados como hombres o mujeres. Con este reconocimiento, prosigue el Tribunal, se beneficiarían aproximadamente 160.000 personas intersexuales, lo que quiere decir que por cada 500 alemanes hay un intersexual en promedio.
El caso
Una persona nacida hacia el año 1989 pidió que se elimine su inscripción como «mujer» del registro civil para que sea reemplazada por una categoría que dijera «inter/diverso» o solo «diverso». Según El País: «El demandante presentó análisis cromosómicos para demostrar que pertenece a un tercer género distinto del masculino o el femenino. La demanda había sido rechazada hasta ahora en diversos tribunales, pero ahora el Constitucional contradice a las instancias inferiores».