Recomendaciones para empezar a escribir tu tesis

La creación de la tesis es un proceso complicado y sin duda el paso más difícil es empezar. Dentro del principio de ese viaje, existen varias etapas que uno debe enfrentar y el doctor Carlos Ramos Núñez nos brindó algunas recomendaciones en su celebrado libro Cómo hacer una tesis de derecho y no envejecer en el intento.

Con esto se aclararán muchas ideas y, como el historiador destaca, encontraremos tantos desafíos como recompensas.

La página en blanco

Ya tienes las hipótesis y has leído (o revisado al menos) gran parte de la bibliografía sobre tu tema. Ya deberías estar listo para empezar a redactar y aquí aparece el síndrome de la pagina en blanco. O lo que podemos entender como una ansiedad ante el nulo avance que vemos en el documento de Word. Algo que  todos los que escriben han sufrido alguna vez.

Ramos Núñez relata que un experimentado profesor de literatura le recomendó una vez romper la pagina en blanco, coger otra y ponerse a escribir. Una idea que vamos a desarrollar más adelante.

La inspiración

El recordado jurista sabe que muchos creen que la inspiración es impredecible y también reconoce que no es viable esperar pasivamente su aparición. Es grave si eres un escritor de ficción y es más grave aun si eres un autor académico.  En ese sentido, Ramos cita a otro arequipeño ilustre como Mario Vargas Llosa.

“No puedo trabajar de otra manera. Si yo esperare los periodos de inspiración, nunca terminaría un libro, porque para mí la inspiración es algo que viene a través de una rutina, una disciplina. Así que ciertos días trabajo con una gran excitación, y otros días no…”

Entonces, aquí se encuentran la mencionada pagina en blanco y la inspiración. Se le derrota, afirma Ramos, si el primer borrador se trabaja arrancando por los puntos más interesantes desde nuestra perspectiva. O en todo caso con los aspectos que ya conocemos perfectamente.

En esta primera etapa, Carlos recomienda escribir basados en la memoria y no apoyados en documentación. Esto solo para romper la inercia inicial que destacamos en párrafos anteriores.

Desarrolla la disciplina 

Lo primero que se debe saber es que la disciplina no es monotonía.

Por eso, señale un horario y ubíquese en un lugar escogido con anterioridad, algo que hemos recomendando también en post anteriores. Todo nos ayudará a identificar nuestros días de baja productividad y hacer que no sea tiempo perdido.

Al reconocer esos lapsus, podemos retrasar tareas más demandantes como la parte principal del texto y dedicarnos a pulir las notas al pie de página o la bibliografía. Cada día vale oro, sobre todo si recordamos una frase de Umberto Eco que Ramos rescata al respecto:

Bastarían unos dos años de trabajo regular para lograr una tesis sólidamente preparada.

Orden y descubrimientos 

Algo que muchos jóvenes no saben es que no es necesario respetar escrupulosamente la arquitectura del proyecto. Hay trabajos que requieren cierto tipo de orden y, sobre todo, cada investigador desarrollará su propio estilo. Pero veamos eso con más calma.

Como escritor de una tesis, puedes trabajar en el orden literal de tu proyecto, desde la primera hasta la última página. Algunos alumnos del doctor han manejado ese estilo, aunque la mayoría ha trabajado como si se tratase de un rompecabezas intelectual. Lo que está bien ya que acelera el ritmo, según lo indicado al momento que hablamos de la disciplina.

Sea cual sea el orden que tomes, es posible que aparezcan nuevas ideas o hipótesis o fuentes. Esto es normal y no debería asustarte, siempre y cuando el eje central de tu proyecto no se pierda ante la tentación de replantear todo.

La revisión temprana 

No es necesario que la tesis esté ya terminada para ser observada y corregida. De hecho, es algo que puedes hacer desde el comienzo y es bueno contar con una persona amiga puede ayudar.

Se sabe que no siempre hay predisposición a ser realmente honesto entre amigos, sobre todo cuando es necesario criticar de forma constructivo. Para eso, Ramos tiene un secreto:

Trabaja con una persona que esté desarrollando su propia tesis. Hagan un pacto de honestidad porque de esa forma ambos se verán completamente beneficiados.


Ramos Núñez, Carlos. Cómo hacer una tesis de derecho y no envejecer en el intento. Lima: Lex y Iuris. 2018, pp. 225-231.

Comentarios: