La popularidad de la presidenta de la república, Dina Boluarte, se ha visto significativamente afectada por el escándalo del caso Rolex. Su aprobación apenas llega al 7% y constituye la más baja calificación de un dignatario luego de 20 años, según Datum Internacional para El Comercio.
La encuestadora reveló que la cifra en mención es la más baja que ha tenido la mandataria, desde que asumió la presidencia en el 2022. Durante el primer trimestre del año, su aprobación se mantuvo en un 10%.
El estudio detalló que el descenso de popularidad podría deberse a los cuestionamientos sobre los relojes de lujo. Sobre el presunto “préstamo” —que recibió por parte del gobernador de Ayacucho, Wilfredo Oscorima—, el 92% de la población afirma no creerle a la presidenta.
Por ello, el 93% de encuestados indicó que Boluarte Zegarra debería “aclarar” públicamente los depósitos de dinero registrados en sus cuentas.
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Actualmente, la Fiscalía investiga a la presidenta por los presuntos delitos de enriquecimiento ilícito y omisión de consignar declaraciones en documentos, motivo por el cual realizaron un allanamiento en su domicilio de Surquillo y en el Palacio de Gobierno.
Asimismo, la baja calificación se ve influenciada por otros funcionarios que la rodean. De acuerdo con el sondeo, el premier Gustavo Adrianzén cuenta con un 70% de rechazo; así como, el titular del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), José Arista con un 65%.
Por otro lado, los resultados señalaron que el 64% de los peruanos son “muy tolerantes” con la corrupción política. Otro personaje que aparece en el informe es el alcalde de Lima, Rafel López Aliaga, con un 61% de desaprobación.