Hay varios tipos de demanda, ya que son documentos realmente importantes en la vida de un abogado. Pero hay consejos que se aplican para cualquiera de los posibles contextos y escenarios.
Recomendaciones claves que le permitirán salir de cualquier apuro ligado a la redacción de estos documentos y que hoy reunimos en esta lista.
1. Tu fuente de información es el cliente
Escucha a tu cliente y recuerda que todo lo que vaya a ir en la demanda obedece a su testimonio. Su versión y su relato, con mucho atención en lo cronológico, debe transmitirse con solvencia a través de tu redacción.
2. Revisa los hechos más de una vez
Toda la información debe tener un soporte y cada afirmación debe apoyarse en una documentación que tú debes tener a la mano. Nada puede estar escrito sin que no este apoyado en la declaración de tu cliente y en los elementos que lo comprueben. Elementos que deberás encontrar usando tu talento como abogado e investigador.
3. Desarrolla un sistema para ordenar tus medios probatorios
Toda la persona que escriba demandas debe confeccionar una sistema para ordenar sus medios probatorios, documentos y testimonios. Esto facilitará el proceso de la redacción y el orden de su narración de los hechos en cuestión, pero también ayudará en todo el proceso posterior que trae consigo el desarrollo de una demanda.
4. La amabilidad puede ser un factor
La demanda no puede sentirse como un acto hostil o un ataque personal hacia la otra parte. Mientras más se sienta que el texto funciona como una agresión gratuita, más posibilidades hay que la otra parte asume una posición similar. Esto minimiza las posibilidades de llegar a un acuerdo, de ser necesario.
5. Motiva algunas preguntas clave
La demanda debe motivar a la otra parte a analizar y llegar a preguntar claras que vayan acorde a tus objetivos y jueguen a tu favor. Preguntas como:
– ¿Cuáles son las posibilidades de perder?
– ¿Cuánto tiempo me tomará solucionar esto?
– ¿Quiero que esta disputa llega a mayores?
6. Pide exactamente lo que quieres
Si es una demanda que tiene un fin económico claro, no seas dubitativo al momento de pedir exactamente lo que quieres. Sé frontal al solicitar una cifra, por más grande que sea, pero también sé directo al explicar como llegaste hasta ese número.
7. ¿Los modelos son importantes?
Los abogados que recién empiezan necesitan una guía y eso es normal. Lo que muchos cuestionan es la dependencia a estos tan famosos modelos, sobre todo cuando algunos profesionales los elaboran en piloto automático.
En LP no recomendamos llegar a ese punto, ya que alentamos a que los jóvenes siempre encuentren su camino en el andar jurídico. Sin embargo, pensamos en los noveles legistas, que en sus primeros años requieren de ciertas recomendaciones. Para ellos, van los siguientes enlaces:
- Modelo de demanda de reposición laboral
- Modelo de demanda de indemnización por accidente de trabajo
- Modelo de demanda civil de indemnización por daños y perjuicios
- Modelo de demanda de prorrateo de alimentos
- Modelo de demanda de separación de hecho y divorcio ulterior
Y puedes encontrar más clicando aquí.
8. Recomendaciones finales
- No uses frases demasiado largas. Un máximo de 20 o 25 palabras es suficiente y para eso no debes temerle al punto seguido. Y mucho menos al punto final.
- Usa las comas, pero no exageres. Los abogados suelen abusar de ellas o ignorarlas completamente, creado párrafos extensos.
- Negritas. Usa las negritas para resaltar ideas claves que quieres que destaquen, pero no exageres ni te apasiones creyendo que todas tus ideas deben sobresalir.
Y además, les dejamos otras seis formas efectivas de mejorar tu redacción jurídica que pueden complementar este último punto.