Al fin conseguiste esas ansiadas prácticas en un despacho de abogados o una institución jurídica y obviamente estás nervioso o nerviosa. Le has pedido consejos a todas las personas que conoces y que han pasado por esa situación, pero todavía no has leído las recomendaciones que LP te dará para afrontar correctamente estas experiencias tan enriquecedoras para tu futuro profesional.
Siempre demuestra tu puntualidad
El gran error que cometen muchos es pensar en la puntualidad solamente en el primer día o en la primera semana. Esto es algo que debes tener en cuenta como una prioridad durante todos los días que asistas al despacho o estudio que te está brindando esta oportunidad.
¿Esto es fácil? No siempre, ya que tus prácticas pueden coincidir con una evaluación de la carrera o un evento universitario de asistencia obligatoria. En esos casos, debes conversar siempre con la persona a cargo para que sepa que cualquier demora no obedece a tu irresponsabilidad o impuntualidad.
Ser impuntual puede crear un estigma sobre tu figura, que puede acompañarte durante años y perjudicar tus oportunidades de encontrar buenos empleos o ascensos.
Cuida tu look
¿Te has dado cuenta de que tus profesores suelen vestirse de manera bastante formal? ¿O que los protagonistas de las series como Suits brillan precisamente por eso? No es un mito alrededor del derecho, es una realidad.
En el mundo del derecho, los códigos de vestir dicen mucho de la persona, por lo que debes cuidar tu imagen en todo momento. El cuidado de elementos como el peinado o la camisa planchada son básicos, y asumimos que no es necesario decirte que no debes ir en sandalias.
Recuerda que has llegado a aprender
Algunos olvidan la finalidad absoluta de las prácticas, pero estás ahí para aprender y complementar lo que ya sabes. Vas a trasladar todos los conocimientos teóricos que has ido aprendiendo en el aula, ya sea virtual o física.
En tus prácticas leerás sobre casos que ha llevado el despacho, realizarás escritos, acompañarás a abogados más experimentados en su día a día. Todo para entender el complejo pero apasionante mundo de la carrera que has escogido.
Así que, si algo no te sale bien a la primera, recuerda: estás ahí para aprender. No cometas el error de muchos jóvenes que no piden ayuda, explicaciones adicionales o consejos sobre las tareas por miedo a quedar mal. Esto nos lleva al punto final de este post.
Muestra interés siempre
Al final de las prácticas, la persona a cargo de tu formación deberá elaborar un informe en el que detalle lo que has aprendido, los inconvenientes encontrados y —atento aquí— tu implicación con la labor desarrollada.
El interés que demuestres se reflejará en tu desempeño, como pasa en cualquier curso de la universidad. Además, puede hacer que te consideren cuando se abra una plaza para un abogado ya egresado. No olvides que, en este periodo de la vida, todo es una futura oportunidad laboral.