Pedro Almodóvar, uno de los directores fundamentales para entender el arte cinematográfico del siglo XX, llega a Netflix. O al menos gran parte de su filmografía lo hará durante esta semana.
Si eres de aquellos que todavía no ha visto ninguna película del aclamado director, esta es la lista que debes revisar. Las mejores de sus cintas que llegan al streaming y que giran alrededor de los temas ligados a la página de LP.
1. Entre tinieblas (1983)
Pedro nos habla, entre otras cosas, de la religión en una España que estaba saliendo de un período bastante conservador. Y lo hace con una historia llena de excesos y con una valentía que no parece la obra de un director que va apenas por su cuarto filme.
Aquí nos presentan a una cantante de boleros adicta a las drogas y que ve morir a su novio por una sobredosis de heroína adulterada. Eso, y otros problemas, la llevan a buscar ayuda en un convento dirigido por una orden que se especializa en darle una segunda oportunidad a ovejas descarriadas como ella. Un lío con la justicia y un grupo de monjas que viven entre el LSD y la literatura barata le darán más sabor a un relato que ya tenía todas las huellas del español.
2. ¿Qué he hecho yo para merecer esto! (1984)
Es curioso ver a Almodóvar adaptar una historia tan ajena como es Lamb to the Slaughter de Roald Dahl, autor de relatos como Willy Wonka y la Fábrica de Chocolates. Evidentemente, el cineasta se toma varias licencias en el proceso.
Aquí conocemos a Gloria, un ama de casa frustrada por su desgastante relación con un taxista con el que convive en un cuarenta metros cuadrados llenos de la absurda realidad de un barrio humilde. A través de una adicta a las anfetaminas que es mejor amiga de una prostituta, Pedro hace una defensa que hoy puede entenderse como feminista y alrededor de las mujeres que crecen en los peores entornos.
3. Tacones lejanos (1991)
Una de las obras que mejor define esta conducta (que requiere de harto talento, por cierto) de llevar al disparate los momentos más importantes del relato. La clave del director al menos en esta etapa de su carrera.
El marido de Rebeca fue en otros tiempos el gran amor de su madre, la diva “Becky del Páramo”. Cuando el hombre muerte, la madre y su hija vuelven a encontrarse, en un choque que mezcla todas las emociones posibles. Todo mientras se nos presenta al juez que lleva el caso (resulta necesario mencionar que es interpretado por Miguel Bosé) es por la noche una drag-queen que imita a la ya mencionada Becky.
4. Carne trémula (1997)
Un gran acercamiento al cine negro, sometido a la españolización o, siendo más honestos, a la almodovardización. Ya que se pierden los ingredientes más gringos del género para adaptarse a los mundos que ya domina a la perfección el director.
Todo el relato es la suma de sus delirantes factores que coincíden en una casa. Elena, su vendedor drogas, polícias y un stalker que terminán en medio de una escalada de violencia en medio de la caída del franquismo, para luego saltar a una década de los noventas que le ofreció a Pedro un conjunto de vicios y dolores que exploró a su voluntad.
5. Hable con ella (2002)
Luego del éxito de Todo sobre mi madre, muchos esperaban que Almódovar llegara al nuevo milenio en un aura de conformismo y satisfacción por llegar a lo que podía ser el punto definitivo de cualquier otro cineasta. Pero Pedro se puso más kamikaze y más adulto con obras como Hable con ella.
Benigno es un enfermero que siente una pasión intensa hacia una bailarina a la que no conoce y que entra en coma luego de un accidente. De esa forma, su musa acaba bajo su cuidado. En paralelo, una torera sufre una accidente en plena faena y cae en coma, llegando también con Benigno. Entre los tres y el acompañante de la torera comienza una historia que nos dejó en claro que el director se había vuelto un maestro al momento de desenredar el hilo narrativo.
6. La mala educación (2004)
Todo lo que definió al director a lo largo de su carrera está aquí, pero mezclado con la madurez que otorgan las décadas de conocimiento. Travestismo, crítica a la religión, obsesiones, violencia sexual, sentido del humor español y la mirada pop del mundo.
Ignacio y Enrique son dos muchachos que sufren abusos sexuales en el colegio y el Padre Manolo, director del centro y profesor de literatura, fue testigo silencioso de esa malda. Luego de veinte años, un reencuentro los hará redescubrirse como humanos. Ahora uno de ellas es un travesti aspirante a actor y el otro es un director que apunta a una siguiente obra maestra.