Sumario: 1. Iremos a Rusia 2018 con la camiseta peruana; 2. No hay delitos en estas manifestaciones de júbilo; 3. Los derechos de los antiguos versus los derechos de los modernos; 4. El republicanismo como afirmación ciudadana; 5. Afirmación de la sociedad multicultural, multilingüe y multinacional; 6. Colofón.
I.- Iremos a Rusia 2018 con la camiseta peruana
El Perú ha vuelto a ser parte del mundial de fútbol (Rusia 2018) después de 35 años, al haber ganado a Nueva Zelanda en el partido de vuelta en Lima, generando una conmoción nacional. Toda la ciudadanía: niños, jóvenes y adultos, mujeres y hombres tomaron las calles por “asalto” en caravanas para expresar el júbilo por este triunfo, gritando al unísono la fuerza de los muchachos que se batieron en la cancha de fútbol, orgullosos de ser peruanos y peruanas.
II.- No hay delitos en estas manifestaciones de júbilo
A pesar de tanta manifestación desbordante no se ha producido ningún hecho delictivo. Los reportes en general, a nivel nacional, no nos han proporcionado hechos lamentables. Lo que muestra cómo es que en estas manifestaciones de cohesión social y de afirmación republicana, existe como anverso de la moneda, el cumplimiento mayor del derecho; no hubo vandalismo o saqueo alguno, desorden más allá de una manifestación conjunta de reafirmación del sentimiento peruano.
Se miraba que personas de todas las edades, de todas las culturas y religiones sacudían sin cesar la bandera peruana y lucían polos con la roja y blanca en el pecho, orgullos de la camiseta. No hay duda que esa expresión representa un claro comportamiento positivo de derecho colectivo muy distinto a las manifestaciones individualistas que puede resquebrajar el sentimiento nacional.
III.- Los derechos de los antiguos versus los derechos de los modernos
Benjamín Constant, el célebre filósofo francés, diría que en estas manifestaciones se expresa claramente los derechos de libertad de los antiguos, versus los derechos de libertad de los modernos. No basta con las expresiones personales para las manifestaciones de libertad sino que ésta debe conjugarse en una construcción de colectividades que le permita una mayor expresión. Así tenemos que un ciudadano será fuerte si su país es fuerte; un ciudadano será alegre y feliz si su colectividad expresa sentimientos de mayor pertenencia e identidad.
IV.- El republicanismo como afirmación ciudadana
El republicanismo nos permite construir una país. Maquiavelo en El Príncipe nos proporciona los métodos para lograr estabilidad y armonía entre gobierno y pueblo; si vemos algunos hechos históricos breves podemos comprender ese grado de cohesión que se genera con la afirmación de derechos colectivos.
En Brasil los negros y blancos no tenían una amalgama social, al contrario, era una sociedad fraccionada. Sin embargo, esa división fue casi anulada con el fútbol, donde todos, sin importar el color de la piel, afirmaban un sentimiento brasileño en los estadios, al extremo que el ícono del fútbol es un negro, el Rey Pelé. Por otro lado, cuenta la historia, que cuando los chancas, un colectivo de guerreros, estaban por invadir el imperio incaico, el Inca Wiracocha, muy temeroso por la derrota huyó y abandonó a los incas y, entonces Pachacutec, sucediéndole, trató de restituir un Dios que una a la colectividad dijo: el Dios Sol debía representar a la colectividad inca y pudo revivir la conjunción de la sociedad y así repotenciarse para vencer a los chancas.
V.- Afirmación de la sociedad multicultural, multilingüe y multinacional
Cuando existe afirmación de sentimientos colectivos, los actos delictivos se reducen enormemente. Estas manifestaciones son un gran aliado del derecho. Nos afirma sentimientos patrióticos que nos permite relacionarnos unos y otros, reduciendo las diferencias de sociedad a nivel multicultural, multilingüe y hasta multinacional. Ahora ha sido el fútbol lo que nos han dado unidad e identidad. Este mismo sentimiento puede generarse, por ejemplo, en la lucha contra la corrupción; en exigencias de mayores niveles de justicia; en una acción política de control, el accountability para que los políticos empujen también el carro en afirmaciones colectivas y no en aprovechamientos personales que disgregan y fraccionan.
VI.- Colofón
Finalmente, estos sentimientos colectivos de amor a la camiseta peruana nos pueden llevar también a queremos como sociedad y, tal vez, los cercos eléctricos y las rejas de las calles y de los parques desaparecerán para unirnos como sociedad. Y estoy seguro de que la delincuencia tenderá a reducirse tremendamente y entonces cambiaremos los patrulleros por mayores lugares de diversión y expresión ciudadanas. Las caravanas multiculturales aparecerán, se afirmará más nuestra cocina, sabremos construir nuestro presente y futuro así el reconocimiento de la pertenencia a ese Perú, que ya avecina en dos siglos de vida republicana.
Dentro de un análisis de la tridimensionalidad del derecho es necesario analizar el hecho, diría el gran hecho del futbol, que nos ha sacudido el sentimiento peruano.