Perú es responsable ante la Corte IDH por la contaminación de la Oroya

Abogada con un Máster en Medio Ambiente de la Universidad Complutense de Madrid y actualmente doctorando. Acreditada en la lista de árbitros de Peruvian Chambers of Business, cuenta con 13 años de experiencia en consultoría de proyectos en sectores como minería, hidrocarburos y agricultura sostenible.

I. ¿Qué implica la sentencia de la Corte IDH para el Perú?

El caso de La Oroya es un ejemplo emblemático de los desafíos que enfrentan las comunidades afectadas por la contaminación ambiental y los derechos humanos. La decisión de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) de responsabilizar al Estado peruano por las violaciones de derechos relacionadas con la contaminación en La Oroya destaca la importancia de proteger el medio ambiente y los derechos humanos en el contexto de actividades industriales. se han establecido medidas de reparación con el objetivo de abordar adecuadamente las consecuencias de dichas violaciones. Estas medidas se orientan hacia varios aspectos clave:

1.-Investigación y Sanción: Se busca llevar a cabo una investigación exhaustiva de los hechos ocurridos y sancionar a los responsables de las faltas administrativas y delitos relacionados con la contaminación ambiental generada por el CMLO.

2.- Restitución del daño: Implica tomar medidas para restaurar o compensar el daño causado a las personas afectadas por la contaminación ambiental, con el objetivo de devolverlas a la situación en la que se encontraban antes de las violaciones de derechos.

3.- Rehabilitación de las víctimas: Se refiere a proporcionar asistencia y apoyo adecuados a las víctimas de las violaciones de derechos, especialmente en lo que respecta a su salud, vida e integridad personal, con el fin de ayudarles a recuperarse de los impactos sufridos.

4.- Publicación de la Sentencia: Se ordena la difusión de la sentencia en los sitios oficiales del Ministerio de Energía y Minas (MINEM), Ministerio de Salud (MINSA) y Ministerio del Ambiente (MINAM), lo que contribuirá a la transparencia y visibilidad de las acciones tomadas y sus resultados.

5.- Garantía de no repetición de los hechos: Se busca implementar medidas y políticas efectivas para prevenir la repetición de violaciones similares en el futuro, lo que implica cambios estructurales y normativos para garantizar una mayor protección del medio ambiente y los derechos humanos en situaciones similares.

Estas medidas de reparación buscan abordar de manera integral las diversas dimensiones de las violaciones de derechos humanos relacionadas con la contaminación ambiental en La Oroya, con el objetivo de promover la justicia, la restauración y la prevención de futuros daños.

II. Como sabemos, ya en varias oportunidades el Estado peruano no ha acatado las normas de protección para los ciudadanos de la Oroya, ¿Cómo sabemos que en este caso sí van a cumplir y qué pasaría si incumplen con la sentencia?

Las conclusiones del tribunal son significativas, ya que reconocen la grave situación ambiental en La Oroya y la falta de acción por parte del Estado para regular y supervisar adecuadamente las operaciones del Complejo Metalúrgico de La Oroya (CMLO).

La negligencia del Estado en este caso ha tenido un impacto directo en la salud y el bienestar de la población local, violando múltiples derechos fundamentales, incluidos el derecho a un medio ambiente sano, a la salud, a la integridad personal, a una vida digna, al acceso a la información, a la participación política, a las garantías judiciales, a la protección judicial y los derechos de los niños. Muchos de los habitantes de La Oroya relatan y muestran la realidad, las cuales son conmovedoras y ponen de relieve las graves consecuencias que la contaminación ambiental ha tenido en la salud y el bienestar de las personas en La Oroya. Sus relatos reflejan el sufrimiento físico y emocional experimentado por la comunidad, así como la falta de apoyo y protección por parte del Estado.

Es preocupante que, a pesar de la urgente necesidad de abordar la contaminación y proteger los derechos de las personas afectadas, el Estado no haya cumplido con su deber de regular y supervisar adecuadamente las operaciones del CMLO. La falta de acción efectiva por parte del Estado subraya la importancia de que los gobiernos asuman su responsabilidad en la protección del medio ambiente y los derechos humanos, especialmente en comunidades vulnerables afectadas por actividades industriales contaminantes.

La decisión de la CIDH destaca la importancia de proporcionar recursos legales efectivos para proteger los derechos de las personas afectadas por la contaminación ambiental. Esto incluye garantizar el acceso a la justicia y la participación significativa en los procesos de toma de decisiones relacionados con el medio ambiente y la salud pública. Incluye disposiciones para proporcionar tratamiento médico, psicológico y psiquiátrico gratuito a las víctimas, así como la implementación de un sistema de atención médica especializada para aquellas personas que presenten síntomas o enfermedades relacionadas con la exposición a contaminantes. Además, la exigencia de que las operaciones del Complejo Metalúrgico de La Oroya cumplan con estándares ambientales internacionales y nacionales, así como la implementación de medidas de compensación ambiental, son pasos cruciales para abordar los impactos ambientales y proteger los derechos humanos en la región.

El programa de capacitación para funcionarios judiciales y administrativos en el sector minero-metalúrgico también es fundamental para garantizar una respuesta efectiva y justa a los casos de contaminación ambiental y violaciones de derechos humanos. Además, el diseño de un sistema de información sobre la calidad del aire y el agua en las zonas afectadas por la actividad minera es esencial para monitorear y abordar los impactos ambientales a largo plazo.

Aunque queda mucho trabajo por hacer para remediar los daños causados y prevenir futuras violaciones de derechos humanos y ambientales en La Oroya y otras áreas afectadas por la actividad minera. Es importante que el Estado peruano cumpla plenamente con las disposiciones del fallo y tome medidas adicionales para abordar los desafíos ambientales y de derechos humanos en la región. En caso de que el Estado incumpla con la sentencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), la Corte podría emitir otra resolución para hacer cumplir sus decisiones. Esto podría incluir medidas adicionales para garantizar que el Estado tome las acciones necesarias para cumplir con las disposiciones de la sentencia y proteger los derechos de las víctimas.

Además, la CIDH podría elevar el caso a la Asamblea General de la Organización de los Estados Americanos (OEA) para que evalúe la situación y exhortar al Estado peruano a cumplir con la sentencia. La Asamblea General de la OEA tiene la autoridad para discutir cuestiones relacionadas con los derechos humanos en los Estados miembros y emitir resoluciones instando al cumplimiento de las obligaciones internacionales en esta materia.

Por lo tanto, el incumplimiento de una sentencia de la CIDH no solo puede tener consecuencias legales directas, sino también implicar presión política y diplomática a nivel internacional a través de la OEA. Esto subraya la importancia de que los Estados acaten las decisiones de los tribunales internacionales en materia de derechos humanos y ambientales, y cumplan con sus obligaciones.

Comentarios: