El Centro de Emergencia Mujer de Lima (CEM Lima), órgano adscrito al Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables (MIMP), interpuso el miércoles 5 de marzo una denuncia ante la Fiscalía Especializada de Violencia Contra la Mujer contra el periodista Gustavo Gorriti.
De acuerdo al Instituto de Prensa y Sociedad (IPYS), en la demanda se atribuye al hombre de prensa emitir expresiones de «violencia psicológica en agravio de la presidenta Dina Boluarte«.
Asimismo, también se indica que lo escrito por el periodista fueron expresiones denigrantes y ofensivas, que normalizan patrones de violencia de género.
Días atrás, el también director del portal IDL-Reporteros escribió una editorial en los que cuestionaba la alusión de la dignataria a una diligencia suscitada, años atrás, en las oficinas de dicho medio de comunicación.
Sin embargo, en el marco de un discurso de respaldo al ministro del Interior, Juan José Santiváñez ―tras un allanamiento a su vivienda y despacho―, la presidenta rememoró un allanamiento ocurrido años atrás en las oficinas de la ONG Instituto de Defensa Legal (IDL).
Más información Inscríbete aquí
Boluarte Zegarra cuestionó, en ese contexto, que se haya archivado en la Fiscalía el caso de aparente injerencia del entonces fiscal de la Nación, Pablo Sánchez, para frenar un allanamiento.
La columna, titulada «La ignorancia es atrevida», contiene una alusión a la cirugía de nariz a la que se sometió la presidenta. «Las mentiras y las distorsiones groseras revientan en la cara y luego no hay cirujano plástico que arregle el rostro de la ruina moral», escribió Gorriti.
Lea más | Dina Boluarte: PJ evaluó tutela de derechos en investigación por encubrimiento personal
El último 5 de marzo, fecha en la que se presentó esta denuncia, el mismo Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables publicó un comunicado en el que expresó su «más enérgico rechazo» a las mencionadas declaraciones, a las que calificó como un ataque directo no solo a la dignidad de la dignataria, sino también como un claro ejemplo de violencia política y de género.
En el comunicado, afirmó que este tipo de expresiones perpetúan patrones de agresión contra las mujeres, especialmente aquellas en cargos de liderazgo:
Las afirmaciones de Gorriti no solo constituyen un agravio inaceptable contra la máxima autoridad del país, sino que también refuerzan una cultura de intolerancia que afecta la democracia y la participación equitativa de las mujeres en la política.