El pasado 5 de diciembre, el pleno del Congreso de la República aprobó por mayoría el dictamen que incorpora al Código Penal el delito de financiamiento ilícito de organizaciones políticas (artículo 359-A).
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El pleno aquel día no estuvo encabezado por el presidente del Congreso, Daniel Salaverry, sino por el congresista Segundo Tapia, quien avaló que la propuesta fuera exonerada de segunda votación, pese al reclamos de diversos parlamentarios, que pidieron que sea debatida y votada después del referéndum.
Hoy, Salaverry, ha salido al frente para cuestionar lo aprobado. «Ley de Financiamiento ilegal de partidos es NEFASTA. No solo le hace un daño terrible al país, sino también, afectará negativamente cualquier pretención política a futuro de quienes se beneficien con ella.», señaló de forma contundente. Y más adelante agregó: «No firmaré autógrafa y someteré a votación la reconsideración planteada».
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La posición de Daniel Salaverry difiere, una vez más, de la adoptado por la bancada fujimorista, a la cual pertenece, aunque se halla temporalmente con licencia.
Cabe señalar que el presidente de la República, Martín Vizcarra, también ha cuestionado la norma y ha adelantado que no la promulgará cuando llegue a su despacho.
Ley de Financiamiento ilegal de partidos es NEFASTA. No solo le hace un daño terrible al país, sino también, afectará negativamente cualquier pretención política a futuro de quienes se beneficien con ella.
No firmaré autógrafa y someteré a votación la reconsideración planteada.— Daniel Salaverry (@dsalaverryv) 7 de diciembre de 2018