Si alguien escucha esta historia, creería que se trata de un relato de fantasmas. La maldición de un hombre que, a pesar de la muerte, quedó atrapado en este plano para seguir atormentando a los vecinos de Trujillo. Sin embargo, esta historia no tiene nada de paranormal y se trata de un ranqueado delincuente que logró engañar al sistema para actuar sin ninguna consecuencia de una forma siniestra: fingiendo su muerte.
Jhonsson Smit Cruz Torres aparece en grandes titulares desde hace años y su historial parece ser mucho más antiguo de eso. Existen registros de que ha sido detenido en varias oportunidades desde los 17 años por extorsión y probablemente todo se remonta a su infancia. Y, sobre todo, su entorno familiar, ya que pertenece a uno de los linajes más oscuros del norte.
¿Quién es el criminal fantasma?
Su padre es Jhon Smith Cruy Arce, alias Jhon Pulpo, el líder de la organización criminal Los Pulpos. Hay que saber que actualmente el progenitor está recluido en el penal de Challapalca, en Puno, desde hace más de una década. Con él aprendió el abc del oscuro negocio y con los años, se perfeccionó en estas artes a tal punto de poder trabajar por su cuenta.
Ante la ausencia paterna, Jhonsson pasó de ser el prometedor líder de Los Pulpos a hacer dupla con su tío Miller Mauricio Cruz, alias Miller Pulpo. Este familiar lo convirtió en el lugarteniente de Los Injertos de K y K, generando un nuevo tipo de terror en La Libertad.
Asaltos y extorsión de la formas más violentas eran su marca característica, a la par de su entrada y salida de la cárcel sin rendir muchas explicaciones. Pero todo se complicó cuando, a principios del 2020 se confirmó su rol como asesino de una comerciante conocida como La reina de la papa trujillana.
El delincuente ya había estado ligado a otras muertes y escenarios repletos de sus huellas dactilares, pero en este caso cometió una serie de errores fatales. En el mercado La Hermelinda, docenas de personas lo vieron matar a sangre fría a una anciana de 60 años. En esta ocasión, era imposible librarse de la responsabilidad, ya que hasta las cámaras de seguridad lo habían captado en el acto.
Y si bien él no fue capturado, sí se logró dar con el paradero de su cómplice. Jhonatan Rafael Quispe Orbegoso fue el conductor del vehículo que sirvió para que el heredero del imperio criminal escapara y además lo acompañó mientras el asesino depositaba dos balas en la cabeza de la víctima. Sin embargo, Jhonsson Smit nunca fue atrapado.
El Tercer Juzgado Penal Colegiado Supranacional de Trujillo sentenció a ambos a cadena perpetua por homicidio y robo agravado, además de solicitar una reparación civil de 60 mil soles para los deudos. La búsqueda del prófugo se intensificó porque esta sería finalmente la caída definitiva del delincuente que había evadido a la justicia por años. O al menos eso creíamos.
Desde la tumba
Un acta de defunción inscrita en el Registro Nacional de Identidad el 4 de agosto del 2020 certificó que Jhonsson Smit Cruz Torres había muerto tres días antes. Los métodos usados para lograr que este documento haya sido emitido son desconocidos, pero en su momento nadie cuestionó su autenticidad. Al contrario, sirvió para que la Policía dejará de buscarlo y descartara su participación en la ola de delitos que azota a Trujillo. Nadie hizo muchas preguntas.
Los procesos en su contra empezaban a ser olvidados y los rumores de su regreso a las calles crecían. Todo parecía ser parte de una leyenda urbana que nadie tomó en serio hasta que fue demasiado tarde. Y el fantasma, con nuevos trucos, empezó a manifestarse.
La extorsión había quedado atrás. Dos secuestros en los que se pedía un rescate de más de 500 mil soles llamaron la atención de las autoridades, tanto por el monto como por la violencia ejercida.
Uno de los raptados falleció torturado y el otro fue devuelto con una oreja menos. No podía oír bien, pero todavía contaba con la capacidad de identificar a uno de los cabecillas de la pandilla que lo traumatizó. Era nada más y nada menos que un hombre muerto que caminaba.
Y a la par, sus secuaces eran atrapados y explicaban ese supuesto milagro tenebroso que alertó a toda la ciudad. Una falsificación que ha sido posible gracias a contactos en altas esferas. Todo se confirmó con la aparición de videos en los que Johnsson Smit aparecía en fiestas durante su supuesta muerte, más vivo que nunca y bebiendo cerveza en un paradero desconocido.
Consecuencias
“Es el principal enemigo de la ciudad de Trujillo y el Perú. Lo tenemos que capturar sí o sí”, señaló el jefe de la División de Secuestros de la Policía, coronel PNP Francisco Moreno, luego de que se confirmaran sus terribles sospechas. Y afirmó eso sin dar respuestas sobre cómo el presunto criminal logró todo esto sin ser detectado o sin dar una pista sobre su ubicación actual.
Las palabras del coronel dieron inicio a una serie de operativos en lugares clave de los familiares ligados a Los Pulpos que aún se mantienen en libertad y en La Libertad.
Mientras se escribe esta nota, escuadrones rompen puertas en toda la ciudad con una frase en común: ¿Dónde está Jhonsson Smit Cruz Torres? La gente responde desconcertada y parecen no saber de qué se trata todo.