Hacia un diagnóstico para el mercado laboral peruano

Sumario: 1. Introducción; 2. Más allá de las estadísticas; 3. Primeros pasos para mejorar; 4. Hacia adelante, pero en conjunto; 5. Conclusiones.


1. Introducción

Desde LP Pasión por el Derecho queremos proponer un nuevo espacio para la reflexión sobre la situación en la que nuestra nación (y el mundo) se encuentra. La pandemia por la covid-19 nos ha expuesto a un contexto crítico, difícil de enfrentar.

Es así que el equipo de trabajo suma esfuerzos para acercar las herramientas que empiezan a vislumbrar las mejoras del país, y elaborar un diagnóstico que nos permita conocer nuestro entorno, saber a qué nos enfrentamos y en qué contexto emprenderemos el sentido de mejora.

En esta oportunidad, queremos darle un espacio a la muestra de junio a agosto de 2020 del Instituto Nacional de Estadística Informática (INEI), que ha estimado indicadores del mercado laboral mediante el Informe Técnico N.° 9 denominado “Situación del mercado laboral en Lima Metropolitana”.

Asimismo, frente a esta información, nos acercamos a los aportes del documento Marco Macroeconómico Multianual 2021-2024 del Ministerio de Economía y Finanzas.

Por último, damos lectura a las recomendaciones de la opinión técnica de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) desarrollada en la Nota técnica país “Perú: Impacto de la COVID-19 en el empleo y los ingresos laborales”.

2. Más allá de las estadísticas

No estamos ante cifras aisladas o representaciones numéricas. Cuando hablamos de una lectura del mercado laboral debemos tener claro que nos referimos a personas en distintos contextos.

Respecto al análisis de la información, conviene explicar los términos más empleados para la representación estadística del informe.

2.1. ¿Qué conceptos se nos muestra en la estadística?

Uno de los primeros conceptos a explicar es la “PEA” o la población económicamente activa. También conocida como fuerza de trabajo, este concepto integra a todas las personas que están ocupadas y las que buscan estarlo. Lo contrario, población no PEA, son conforma por aquellas personas que por su edad no pueden integrar el mercado de trabajo.

Se añade a nuestros conceptos el término “PET“, que significa la población en edad de trabajar. Aunque suene similar a la PEA, PET significa el total de las personas que tengan entre 14 años a más.

La primera cifra importante que debemos conocer es que solo en Lima Metropolitana hay cerca de 7 millones 920 mil 100 personas con edad para desempeñar una actividad económica; es decir, población que puede insertarse en el mercado laboral [1].

2.2. ¿Desempleo o reducción de población ocupada?

El siguiente gráfico nos muestra en miles de personas y porcentaje que corresponde a la PEA, no PEA. Como podemos apreciar, del espectro total de la PEA, el 84,4% se encuentra ocupada y el 15.6% busca estarlo.

(Extraído del Informe Técnico N° 9 setiembre de INEI., 2020)

Sobre este concepto, se detalló que durante el trimestre junio-agosto, la PEA disminuyó en un total del 54,0%, es decir, 4  millones 277 mil 100 personas de la población en edad de trabajar.

Debemos prestar atención a las cifras de la población económicamente activa desocupada, puesto que aumentó a 665 mil 800 personas, llegando a representar al 15,6% del total de la PEA.

Por otro lado, a manera de comparación, el informe muestra que la PEA femenina disminuyó en mayor proporción que la masculina. Específicamente, 539 mil 700 mujeres dejaron de trabajar.

Otro aspecto a resaltar son el porcentaje de trabajadores por cada ramas de actividad. Así, se presentó la siguiente gráfica:

(Extraído del Informe Técnico N° 9 setiembre de INEI., 2020)

Como vemos, se ha reducido la población ocupada en todas las ramas de actividad, “se redujo el sector Construcción en 46,6% (182 mil  100 personas), Manufactura en  31,2% (204 mil 500 personas), Servicios en 27,0% (765 mil 500 personas) y Comercio en  4,7% (143 mil 500 personas)” [2].

Estas cifras nos acercan a la realidad del mercado de trabajo y, en el mejor de los casos, debe coincidir con el plan del gobierno para reactivar la economía.

3. Primeros pasos para mejorar

Frente a esta información (aún limitada), la respuesta debe ser integral e institucional.

El Gobierno ha iniciado con la política de reactivación económica, y también ha centrado su trabajo por medio de las proyecciones del Ministerio de Economía y Finanzas. El resultado es el documento “Marco Macroeconómico Multianual 2021-2024”.

Esta propuesta incluye la respuesta política y económica de nuestro gobierno frente a la covid-19. Además, se condice con el Plan Económico presentado por el mismo ministerio.

Tal como se presenta en el resumen ejecutivo, el desempeño de la economía peruana mejoraría en comparación con la primera mitad del año, toda vez que seguirá el plan de reanudación de actividades económicas. También se destaca el importante impulso fiscal que se viene implementando a través de un fuerte aumento del gasto público no financiero [3].

Esta proyección se condice con el aumento de exportaciones, que sucederá en tanto se recuperen los grandes aliados comerciales de nuestro país.

3.1. Plan de fortalecer la política fiscal

Por otro lado, el documento técnico precisa que para el año 2021 se iniciará el proceso de consolidación fiscal, con lo cual se “prevé un repunte significativo de los ingresos fiscales, que crecerán 20,2% real, en línea con el crecimiento económico y los repagos de impuestos aplazados” [4].

De esta manera, la política fiscal tendrá como objetivo reducir el déficit fiscal, lo que significaría que se reduzca la deuda pública.

En cuanto a los proyectos para la reactivación económica, la ejecución de la cartera de proyectos del Plan Nacional de Infraestructura (PNIC), que consta de 52 proyectos por un monto de inversión de alrededor de S/ 99 mil millones y que permitirá  cerrar cerca del 30 % de la brecha de infraestructura de largo plazo.

No obstante, respecto a las debilidades estructurales, el documento reconoce que existen factores que limitan la efectividad de las políticas para el control de la pandemia. Ante esto, se ha señalado que se continúa con la implementación del “Plan Nacional de Competitividad y Productividad”.

4. Hacia adelante, pero en conjunto

Las políticas de fomento económico y la información recolectada sobre el mercado de trabajo nos lleva a buscar salidas a corto y largo plazo.

En ese sentido, queremos cerrar este breve texto compartiendo brevemente las recomendaciones de la Nota Técnica País: “Perú: Impacto de la COVID-19 en el empleo y los ingresos laborales“. Nota que aborda el análisis sobre el mercado de trabajo y el empleo, concluyendo en una serie de recomendaciones finales, tal como se presenta el mismo informe:

El estudio ofrece también un conjunto de recomendaciones en torno a la promoción de  políticas de desarrollo productivo, la implementación de políticas activas del mercado de  trabajo, el fomento de la formación, la digitalización de una parte de la economía y el impulso de nuevos sectores productivos.

4.1. Recomendaciones para nuestro crecimiento  en conjunto

Así, se desarrollaron tres recomendaciones principales (que se extienden en directrices específicas) que se pueden resumir de la siguiente manera:

1. La reactivación del empleo a través de la diversificación productividad y la creación de un entorno de promoción de empleos formales hacia una “mejor normalidad”: Esta recomendación prioriza la convergencia productiva y la igualdad; asimismo, desarrollar actividades tecnológicas que fomenten al conjunto de economía, a través del encadenamientos productivos.

Asimismo, mejorar el sistema financiero hacia uno inclusivo que mejore el acceso a los recursos de inversión (por ejemplo, de los hogares y microempresas).

2. Impulso del empleo decente a través de la inversión en políticas activas del mercado de trabajo: Se proponen programas masivos de capacitación/entrenamiento/reconversión laboral; programas temporales de empleo público; subsidios para planillas de empresas.

3. Fomentar el empleo mediante la fomalización, la digitalización de una parte de la economía y el impulso de los nuevos sectores productivos [5].

Recomendamos revisar la nota técnica sobre el Perú de manera completa, así como las recomendaciones finales otorgadas por los especialistas de la OIT, que hace contraste con el plan macroeconómico del MEF y se involucra con la lectura del último informe de la INEI.

El rol de cada uno de nosotros es lograr fiscalizar que se cumpla la agenda con respecto a estas recomendaciones, e involucrarnos con estos objetivos. Teniendo las herramientas en la mano, podemos pensar en mejorar en conjunto.


[1] INEI (2020). Informe Técnico: “Situación del Mercado Laboral en Lima Metropolitana”, Trimestre móvil: junio-julio-agosto 2020, N.° 9, setiembre 2020.

[2] INEI (2020), Ibidem.

[3] MINISTERIO DE ECONOMÍA Y FINANZAS (2020). Marco Macroeconómico Multianual 2021-2024.

[4] MINISTERIO DE ECONOMÍA Y FINANZAS (2020), Ibidem.

[5] GAMERO, Julio y PÉREZ, Julio (2020). “Perú: Impacto de la COVID-19 en el empleo y los ingresos laborales”. Nota técnica país: Panorama laboral en tiempos de la COVID-19, OIT.

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