El reggaeton es un género que sigue generando división a pesar de que hoy es más aceptado que nunca. Pasó de ser el paria de la música para estar incluido dentro de festivales como Coachella y representar a Latinoamérica en los late night shows más famosos del mundo.
Se le resume como una fórmula machista y degradante, pero hay varias cosas que se pueden decir al respecto. Hasta el más rock más duro ha optado por la misoginia en sus composiciones y hay reggaeton que busca hablar de algo más
Existe, por ejemplo, reggaeton que busca hablar de la complejidad de la calle y de las desventuras con la justicia. Algo que la salsa ha hecho con más poesía, pero que el género urbano ha intentado con una crudeza que obedece al contexto.
Por eso hoy les presentamos cinco clásicos del género urbano con trasfondo jurídico. Desde la vieja escuela hasta las tendencias actuales, que siguen posicionándose.
1. Somos de calle de Daddy Yankee (2008)
No dañes tu récord, pa’, con un anormal.
Las leyes de la calle no son las del tribunal.
Aquí los jueces dictan la sentencia con fuego.
En duelos donde no existe el arreglo ni el consuelo.
(…)
Y en la calle, te los comías vivo.
El fiscal te metió presión con el tecnicismo.
Terminaste sentao’ en la silla ‘e los testigos.
Vaya, qué lindo nombre le pusiste al caserío.
Daddy Yankee se hizo famoso por cantar sobre gasolina y las exes, pero también ha buscado temas más complejos en su lirica. Ese es el caso de, entre otras canciones, Somos de calle.
Ramón Ayala, el verdadero nombre del cantante, creció en medio de de los barrios más bravos de Puerto Rico: Las Lomas y Villa Kennedy. Fue en uno de sus paseos entre estos lugares donde recibió un balazo de una AK-47, en medio de un atentado destinado a otro joven.
La bala destruyó sus sueños de dedicarse al beisbol, pero lo acercó a su otra pasión, que era la música. Aquí fue creciendo hasta llegar a ser la megaestrella latina que es hoy, pero sin olvidar sus raíces en ese barrio fino del que tanto habla. Somos de calle es una de las tantas historias de ese escenario.
2. Bandoleros de Tego Calderón y Don Omar (2005)
Me cogí un caso y apuntaron el dedo.
Ya no era el rey del perreo.
Ahora era tecato y otro posible reo.
Que me metieran preso dos dijeron, mal lo veo.
Yo no les creo a su sistema de reformación ingrato.
A mi me arrestaron dos puercos por pasar el rato.
Y yo aquí pichando, aguantando, callando.
Si nadie es perfecto, de que me están juzgando.
Al igual que el caso anterior, Don Omar llegó a la cima con canciones pegajosas que giraban alrededor de la fiesta y el sexo. Sin embargo, las reflexiones en sus canciones cambiaron al momento de producir el álbum Los bandoleros, que incluye una canción homónima.
En ese momento, el cantante enfrentaba un problema judicial bastante complejo. Iba a visitar a su madre en San Juan cuando los efectivos policiales encontraron en su camioneta una pistola con el número de serie borrado y cuatro cigarrillos de marihuana.
El proceso tomó años y finalmente William Landrón, verdadero nombre del artista, fue absuelto. El proceso, sin embargo, fue bastante extraño. Los agentes entraron en constantes contradicciones sobre los detalles del operativo y uno de ellos, Nefatlí Molina, mantenía una relación con una ex del autor de Danza Kuduro.
La canción Bandoleros es un resumen del caso constando en la perspectiva del Don, con la ayuda de Tego Calderón. Un veterano que también ha vivido varios choques con la ley.
3. Digo lo que pienso de Calle 13 (2010)
Eres corrupto tú lo sabes yo no me chupo el dedo.
Tienes cara de narcotraficante con miedo.
Con el dinero de las regalías de esta canción,
te prometo que te llevo a Cuba y te pago la rehabilitación.
No me vengas amenazar con la CIA.
Yo también tengo amigos policías.
Amigos en México, Colombia y Venezuela.
Cuba, Argentina y hablo con ellos todos los días.
Tengo amigos que te han visto capeando el perico.
La coca oliendo, olfateando.
Pa’ que no digas que esto es un montaje,
yo te invito hacernos la prueba de dopaje.
Para los que conocen a Calle 13, no es una sorpresa que su música siempre ha estado sumergida en protesta política y social. Pero Digo lo que pienso debe ser la canción más conflictiva en el sentido jurídico.
En el tramo final de esa canción, René Pérez hace una larga y sentida acusación contra un “alcalde” que todos los puertorriqueño identificaron como Jorge Santini, alcalde de San Juan. Esto debido a que el burgomaestre señaló como “tecato”, lo que en Perú sería “pastrulo”, como una crítica al contenido musical de la agrupación.
El cantante respondió en una entrevista radial, invitándolo a hacerse una prueba para determinar quien era el consumidor. Todo escaló hasta la canción que acompaña esta parte del post y unas constantes amenazas de demandas por difamación que nunca se concretaron.
4. Delincuente de Anuel AA (2019)
Llegó un chárter privado a la pista ‘e aterrizaje.
Desembarca individuo, conocido personaje.
Un can del TSA se sienta y marca el equipaje.
Y oficiale’ de aduana preguntan que cuánto en efectivo traje .
Disculpe oficial, no recuerdo cantida’ exacta.
Vengo cansa’o del viaje, un mal rato no me hace falta.
Si e’ má’ de lo debido, pues se reporta y se informa.
Llené mal el papel, disculpa, no leí las norma’.
No hay nada que esconder, yo ando totalmente legal.
Jefe, yo soy cantante, yo vengo de trabajar.
Confísquenlo si quieren, con él se pueden quedar.
Pero no venga a arrestarme porque se quieren pautar.
La historia sobre el paso por la prisión de Anuel es super conocida, motivando una campaña en redes sociales conocida como #FreeAnuel. Un relato que el propio cantante ha explorado en canciones varias veces, entre ellas en la canción Delincuente.
El artista fue detenido con tres pistolas, una de ellas robada, nueve cargadores y 152 municiones. Además de una gran suma de dinero en efectivo. Su condena, por posesión ilícita de armas, se evaluó durante más de un año hasta que el Tribunal Federal de Puerto Rico lo sentenció a 30 meses de prisión efectiva.
Pero luego de 10 meses y por su buena conducta en prisión, Anuel AA fue puesto en libertad para seguir con una carrera que muchos encuentran cuestionable en relación a su calidad. Incluso el autor de esta nota.
5. Bellacoso de Residente y Bad Bunny (2019)
En la letra, Bellacoso no contiene una referencia jurídica evidente. Pero la historia detrás de la canción sin duda evoca a temas que son debatibles en esta página.
La canción nace en medios de las protestas en Puerto Rico del 2019, donde se pedía la renuncia del gobernador del país, Ricardo Rosselló y sus colaboradores. Esto luego de una filtración de conversaciones en las se habrían hecho comentarios homofóbicos, discriminatorios y de burla hacia las víctimas del huracán María de 2017.
René, ex Calle 13 y ahora en modo solista como Residente, lideró varias manifestaciones junto a Bad Bunny. Prometieron colaborar juntos si Roselló renunciaba, lo que tuvo lugar luego de varias agitadas fechas de protesta.
Bellacoso es una canción coqueta que dentro de su ritmo hace espacio para enfatizar el consentimiento en las relaciones sexuales e identifica el acoso como una connducta censurable de las interacciones.